Netflix cambia las reglas del trabajo en la empresa de hoy. La compañía, especializada en la producción de contenidos televisivos y películas, así como en proporcionar un sólido servicio de streaming, no entiende de horarios. Para esta empresa lo importante es trabajar en base a los resultados y proporcionar a su equipo una gran confianza.
No creen en los horarios
Los empleados que trabajan para Netflix lo hacen con unas condiciones muy exclusivas desde el 2014. Fue entonces cuando sus ejecutivos se dieron cuenta de que los trabajadores estaban muy comprometidos con la empresa, tanto que desde casa trabajaban si hacían falta horas extra o solucionar diversos problemas. Llegaron a la conclusión de que si el tiempo fuera de la oficina no se contabilizaba, ¿por qué deberían hacerlo en el que sí están en la oficina?
Al final se dio vueltas a la idea y en la empresa llegaron a la conclusión de que eliminarían tanto los horarios como los periodos de vacaciones. Esto último de manera positiva, puesto que los empleados tienen la oportunidad de irse de vacaciones cuándo y cómo quieran. No hay límites más allá de los que cada persona se debería imponer así misma. Por lo tanto, mientras se realicen las entregas del trabajo pendiente en los plazos acordados, será suficiente para que la relación empresa-empleado funcionde de manera perfecta.
Vacaciones todo el año
Esto se puede ver como si los empleados de Netflix no trabajaran nunca, pero la lectura que se debe obtener es una bien distinta. En realidad el concepto positivo es ver que esta empresa ha alcanzado la estabilidad y el éxito dando toda su confianza a sus trabajadores. En respuesta a este nivel de confianza estos empleados han pasado a tener un mayor índice de productividad y también a estar más vinculados con la empresa. Han nacido empleados que entienden que Netflix está cumpliendo con lo que su generación necesita.
La forma de pensar de Netflix ha funcionado perfectamente, aunque nos da la sensación de que la gran mayoría de las empresas no se atreverán a intentar poner en práctica una filosofía como esta. Otra cosa es si nuevas empresas que aún no tengan estipulados unos métodos de trabajo probarán suerte e intentarán seguir los pasos de Netflix. No todo el mundo puede ser Netflix, pero con un poco de esfuerzo no debería ser tan complicado triunfar y compartir las buenas vibraciones con los compañeros de la empresa.
